En sintonía con las distintas campañas nacionales que piden la separación entre Iglesia y Estado luego del debate por la legalización del aborto, el Concejo de Rosario aprobó este jueves una iniciativa presentada por Celeste Lepratti para remover símbolos e imágenes religiosas en escuelas y hospitales públicos de la ciudad. Tiempo atrás existió una iniciativa similar a nivel provincial pero no prosperó.

La ordenanza aprobada establece que, a través de los Ministerios de Educación y Salud de la Provincia, se remuevan los símbolos e imágenes religiosas instaladas en escuelas y hospitales públicos a modo de “garantizar el efectivo cumplimiento de los principios de libertad religiosa y conciencia, reforzando el carácter laico de Rosario”.

En tanto, Lepratti señaló que la ordenanza se refiere a los “lugares comunes”, por lo que contempla algunas excepciones tales como los oratorios al interior de los hospitales, donde las personas deciden acudir por voluntad propia, y las obras de arte o lo que se considere como parte del patrimonio del lugar.

“Ojala esta iniciativa también puede llevarse adelante en otros lugares de la provincia. Es muy saludable porque habla del respeto y la igualdad. Es importante entender que se puede o no profesar cualquier culto, pero tiene que haber libertad  y no imposición. Es fundamental para convivir en la diversidad”, concluyó Lepratti.

En un año de pañuelos verdes y naranjas

El proyecto de la edila del Frente Social y Popular se da tras el debate sobre la legalización del aborto y en el marco de un resurgimiento del debate sobre la separación Iglesia-Estado en todo el país gracias a la denominada Campaña Federal, que entre otras cuestiones puso la lupa en el financiamiento a la Iglesia Católica.

Cabe señalar que es que la propia Constitución Nacional la que establece el sostenimiento del “culto católico apostólico romano". “Todavía existen decretos y leyes que regulan el dinero que se deriva  a la Iglesia católica los cuales fueron impuestos durante la última dictadura militar”, indica al respecto el texto del proyecto.

Antecedentes sin final feliz

La ordenanza cuenta un antecedente a nivel provincial que no llegó a buen puerto. Es que en 2010 y 2010, la legisladora Alicia Gutiérrez presentó en la Cámara de Diputados un proyecto de similares características que en ninguna de las ocasiones fue tratado y terminó perdiendo estado parlamentario.

“Se produjeron una serie de hechos vandálicos en nuestro local partidario en la ciudad de Santa Fe, con inscripciones e insultos por parte de un pequeño grupo de intolerantes que no saben distinguir lo que es de todos y lo que es de un grupo, sea o no mayoritario”, señaló la legisladora a Rosarioplus.com.

“Las imágenes religiosas son del orden de lo privado y practicar o no una religión es una opción que tiene cada uno. Está garantizado por la Constitución Nacional y los Derechos Humanos, por lo que ningún Estado puede imponer un determinado culto a sus ciudadanos”, agregó al respecto.