Se trata de Roberto Gustavo Gamboa y sus dos hijos, Gustavo y Brian. Fueron condenados a prisión perpetua por el crimen del joven punk, Ezequiel Flores.

El padre de los tres acusado, Roberto Gamboa, envió una carta pública en la que, además de seguir reclamando por su inocencia, pedía ayuda para conseguir un abogado honesto, “con ganas de ayudar al prójimo”, para que tomara la presentación de revisión de la pena

Tanto el padre como los hijos de Gamboa fueron condenados a prisión perpetua luego de que el tribunal concluyera en que fueron los autores del asesinato de un joven punk, llamado Ezequiel “El Furia” Flores.

En este mensaje, que lo envió desde la prisión, también expuso una forma de pagar bastante extraña: dijo que pagaría la revisión de su caso con los órganos de él, de sus hijos y hasta los de su esposa.